A todas las mamás nos encanta que nuestros hijos sean creativos, que inventen cosas y luego nos las presuman, o que pasen el tiempo en casa jugando, creando o leyendo, en vez de estar en pantallas, ¿a poco no?…
Pero para que eso suceda, para que ellos tengan el espacio y las condiciones necesarias para inventar y echar la imaginación a volar, debemos estar dispuestas a bajar nuestras expectativas con respecto a la pulcritud de nuestra casa.
Hoy les dije a los niños que en todo el día no usarían pantallas, y el resultado fue, un teatro de luces y un show de dinosaurios completamente inventado por ellos; pero también el resultado fue mucho pero mucho desorden (que luego ellos recogen), cosas fuera de su lugar, como esos libros en la repisa, y sábanas recién lavadas ¡tocando el suelo!
¿Me quería dar el patatus? ¡SI!
…pero al ver el resultado y bajar mis expectativas, simplemente ¡sonreí!… dimensioné la capacidad que tienen nuestros hijos de crear y soñar y hacer cosas que ni nos imaginamos, y realmente me sorprendí.
El desorden y las cosas tiradas un día desaparecerán; mientras tanto, bajemos un poquito la guardia y dejemos que nuestros hijos vuelen alto en su creatividad, porque eso es algo que ¡NUNCA LOS ABANDONARÁ!
Cuéntame, ¿Qué han hecho tus hijos con su creatividad que te han sorprendido? ¿Los has dejado que jueguen como quieran o pones las reglas y el orden antes de que empiecen? Te leo.