Las bodas son eventos en vivo, sin ensayo y sin previo aviso, así como la vida. Un consejo que les digo a las novias es que suelten todo antes de que llegue el gran día.


Cuando puse el título de 3 cosas me costó trabajo sólo pensar en 3. Algo que siempre he pensado es que la vida se complica cuando la queremos controlar, una boda se vuelve un poco lo mismo.

Tu boda es un día muy especial que se puede convertir en lo que menos querías si tienes mil expectativas y esperas que todo salga como quieres y tratas de controlar todo. Muchas cosas no se pueden controlar porque existen situaciones fuera de las manos de cualquiera que pueden pasar ese día.

No vas a poder controlar…

1. El número de invitados: Es muy complicado siempre para los novios definir el número final de invitados después de las confirmaciones (y más en esta época de COVID). Muchos invitados no contestan las llamadas, mensajes o dicen que todavía no saben y se complica porque no se puede cerrar el número final de la boda. Además de que se tiene que ver pagos con proveedores que van de acuerdo al número de personas. Muchos invitados además el mero día no llegan, entonces no existe una manera mágica de poder controlar esto y lo mejor es soltar, la gente que tiene que estar ahí va a llegar y lo van a disfrutar tanto como ustedes. Yo siempre les digo a las parejas que caso que “siempre van a salir perdiendo con el banquete porque terminarán pagando gente de más de la que realmente irá a la boda».

2. Darle gusto a todos los invitados: Siempre las parejas están pensando en todo el mundo menos en lo que ellos quieren o necesitan. Como en qué comida será la que a todos sus invitados les guste, si el postre está bien de este sabor o del otro, si la música les gustará a todos, poner transporte porque tienen que ayudar a ver como se van a regresar las personas a su hotel o casa. La realidad es que nunca le vas a dar gusto a nadie, porque creo que el ser humano por naturaleza siempre quiere algo más o se queja de lo que tiene. Si tratan de hacer la boda en querer complacer a sus invitados nunca lo van a lograr, mejor hagan todo lo que ustedes 2 quieren y nadie más.

3. Que algo no salga como planeado: Así como lo he dicho, los eventos se planean con mucho tiempo de anticipación pero no se pueden ensayar, todo va pasando unos días antes del evento y el día de la boda pasa prácticamente todo lo que llevamos planeando a veces más de un año. Al ser un evento en el que están involucradas muchas personas, horarios, clima, etc. SIEMPRE puede pasar algo que no estaba planeado. Por eso es super importante tener a un profesional encargado de solucionar este tipo de imprevistos que a veces te enterarás que pasaron y muchas otras no, pero al final si no sueltas y sabes que esto es posible no vas a disfrutar ni medio minuto de tu boda.

Y como extra

Algo que NUNCA vas a poder controlar es el clima.
Siempre me preguntan que fecha es mejor para casarse, que no llueva y que no haga tanto calor ni tanto frío. La realidad es que ya no sabemos nada con el clima, es super variante y cambia todos los años. Elige la fecha que más te guste y no lo hagas por el clima, ya más cercano el día revisas el pronóstico y vas viendo como solucionar si va a llover o no, además dicen que es de buena suerte que llueva, ¿no?

En mi boda llovió muchísimo y todo el mundo se acuerda ahora y nos da risa. Así es que espero que te sirva todo esto pero mi mejor consejo es: ¡Relájate y disfruta! No dejes que nada te quite la calma y te impida disfrutar lo que llevas planeando y soñando por tanto tiempo!

Fotos: Gettyimages, Dezzain